domingo 21 de marzo de 2010
La Classicissima
Hola Amigos!
Desde la tranquilidad que da el estar en casa, sin el estres de la carrera, os escribo para contar como fue mi primera Milan - San Remo, y os aviso que estoy con ganas de escribir, así que prepárate, esto puede ser mas largo que los 298kms de la San Remo!
El día empieza temprano. Desayunamos como si acabara el mundo, y nos montamos en el autobús. Arrancamos hacia Milan!Entre preparativos, y reunión se me echa el tiempo encima, y no puedo estar todo el tiempo que quisiera con unos amigos que vienen de Oñati y Bergara al autobús. Nos sacamos una foto, y me voy derrapando a firmar!
Una vez en el control de firmas, saludo mis ex compañeros de Euskaltel, me hace ilusión verles, y aprovecho que salimos tranquilos para charlar con ellos.
Pero empieza la carrera de verdad. Nos dejamos de charletas, y nos metemos en carrera. Llueve, y la carretera está peligrosa. Vamos hacia el Turchino ( la primera subida del dia ). Empezamos a buen ritmo, y se va acelerando. No lo conozco, pero intento ir adelante. Llegamos al tunel de arribas, y Madona mia! no está iluminado!
Pasamos rápido, y bajamos a fuego. El Aqua Sapone tira rápido, y no entiendo el porqué! Noto que no oigo nada por la radio . Parece que pierdo cobertura, bueno eso era el año pasado, digamos que pierdo la frecuencia, y me quedo sin radio. Miro para atrás, y solo vamos unos 70. no conozco nada de la carrera, y no me pueden decir nada del coche, haber como me las arreglo.
Le oigo a Koldo que le dice a Alan, que la siguiente subida es dura. Me coloco adelante, por si la cosa se pone seria. Libro la caída del principio del puerto, y Ivanov pone un ritmo matador. A falta de un km miró para atrás, y solo quedan detrás mio Scarponi e Impey. Vamos cuatro y el apuntador!
Bajamos el puertito, y solo vamos unos 35, pero queda mucha carrera, se ralentiza un poco, y vuelve a entrar la gente. El grupo de Cavendish viene a un minuto, y sería perfecto que no entraran para evitar la tensión de colocación de la Cipressa. Pero justo antes de los capos, entra todo el mundo, y la cosa de complica. Recuerdo que me dijo mi amigo Galdos: después de Alassio, vienen los capos y luego la Cipressa. Tienes que ir adelante. Procuro hacerle caso, paso los capos adelante, pero donde está la Cipressa? Voy preguntando a la gente cuanto falta , hay una tensión del carajo, pierdo unas posiciones, y curva a la derecha! Porco dio! ya voy el 60! Empezamos a tope, me noto forzado, pero me digo a mi mismo que puedo aguantar. Llegamos al páramo de arriba, y alguno se ha cortado, casi todo el Caisse, El Garmin, Hincapie y Ballan están con nosotros. Ya entraremos, pienso entre mi! Pero no hay ni mucha fé, ni mucha fuerza, y cuando los que tiran adelante de apellida, Kreuziger, o Pellizzoti, poco se puede hacer!
Al final llegan 35 corredores delante de nuestro grupo, y llego bastante decepcionado. La cosa pintaba bien al principio, pero no he podido estar adelante!
Me quedo con la sensación que se podía hacer algo más, pero lo hecho, hecho está!
Pues nada, con ese sabor agridulce os dejo! Tan sólo felicitarle a ese super talento que se llama Oscar Freire. Lo suyo si que es una genética diseñada para la bici!
Hasta las siguiente clásicas, un fuerte abrazo.
Markel
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