De Arrasate a Oñati en bici

En mayo se estrenará el carril bici de más de ocho kilómetros que unirá ambos municipios



arrasate, anabel dominguez - Domingo, 17 de Febrero de 2013 - Actualizado a las 05:23h

Los trabajos del bidegorri que durante estos días se acometen en la rotonda de San Prudentzio. (A.D)

EL bidegorri que unirá Arrasate, desde Epele, y Oñati será una realidad en mayo. Con estas previsiones trabaja el departamento foral de Movilidad e Infraestructuras Viarias que es el encargado de afrontar este carril bici cuya puesta en marcha esperan impacientes los apasionados a pedalear. "Mayo es el mes que se ha establecido para que terminen las obras, quizás consigamos adelantarnos un poco pero no va a ser fácil", señalan desde el ente foral.



Y es que cualquier contratiempo puede torcer los planes. Hace escasas semanas arrancó la actuación para acondicionar el paso subterráneo a la altura de la rotonda de San Prudentzio, y fue entonces, cuando sin esperarlo "nos encontramos con una roca muy dura en el momento de iniciar la excavación", recuerdan desde la Diputación.



El proyecto del tramo que conectará Epele con el barrio oñatiarra de Zubillaga le supondrá a las arcas forales un desembolso de más de 1,3 millones de euros. La empresa Murias se afana desde hace unos meses en poner a punto un trayecto de 4.556 metros de longitud que parte desde la depuradora de aguas residuales de Epele. Se han aprovechado algunas de las obras realizadas a esta altura para avanzar en la construcción de la infraestructura.



alumbrado



Con detectores de presencia



Según detallan desde la entidad territorial, el bidegorri, que discurrirá por un aglomerado asfáltico, tendrá una anchura de 3,5 metros: dos metros para bicicletas y el resto para peatones. El recorrido, en general, está sustentado en la antigua plataforma del ferrocarril Vasco-Navarro y su pendiente media es de 1,66%. Todo el itinerario dispondrá de alumbrado tipo Led que regulará el nivel de iluminación en función de la presencia de personas (las farolas se activarán por sensores de movimiento). "En los tramos a cielo abierto se colocarán cada 35 metros y en los túneles cada 12 metros", precisan las mismas fuentes. La actuación permitirá rehabilitar los viejos túneles del Vasco-Navarro, el de Errekabaltz y Minazulueta.



El bidegorri encara estos días su fase en la glorieta de San Prudentzio donde se acondiciona un paso subterráneo que tras atravesarlo permitirá alcanzar la pasarela de acceso a la clausurada fábrica de Tavex, ya en Bergara, para girar después hacia la derecha en dirección al barrio oñatiarra de Zubillaga. Con motivo de estos trabajos, que se llevarán a cabo en dos fases "en febrero y marzo", la circulación está sufriendo algunos cambios.



Para mediados de marzo



Del casco urbano a Zubillaga



Mientras tanto, las obras del bidegorri entre el barrio de Zubillaga y el casco urbano de Oñati (Kur-tzekua), que se han retrasado por algunos cambios introducidos en el proyecto inicial, se espera que concluyan "para mediados de marzo". "Falta acabar el paso subterráneo de Madalena para rematar estos trabajos", indican desde el ente foral. En este caso la inversión supera los 1,9 millones de euros para un trazado "del todo llano" de 3, 8 kilómetros. Con ambas infraestructuras operativas, Arrasate y Oñati estarán comunicados por un carril bici de más de ocho kilómetros.