Con la llegada del verano y el buen tiempo el uso de la bici se dispara. Los bidegorris viven su temporada alta, y la red local no es una excepción. El carril rojo entre Oñati y San Prudencio supuso una auténtica revolución, al elevar muchos grados la fiebre lúdica txirrindulari, y ahora le llega por fin el turno a Olabarrieta.
Acaban de adjudicarse las obras de la plataforma de 800 metros que permitirá, tanto a los vecinos de barrio rural, como a los aficionados al senderismo y la bicicleta, conectarse de forma segura y sostenible con la trama urbana tras una inversión de 358.000 euros. La empresa vizcaína Gatika ha rebajado 156.000 euros el presupuesto inicial y reducido también el plazo de ejecución en 15 semanas, así que si no hay contratiempos el bidegorri se inaugurará en otoño.
El objetivo del Ayuntamiento es completar el denominado «cinturón verde» y seguir trabajando para poder atravesar Oñati de punta a punta de modo sostenible. Considera que la extensión de la red de bidegorris ayudará a que coger la bici para ir al trabajo o para salir, sea más fácil, y las dos ruedas sean un buen aliado para moverse por el municipio.
La vía para caminantes y ciclistas de Ugarkalde a Olabarrieta se ha proyectado en la margen izquierda de la plataforma actual de la carretera GI-2630, y para su implantación se reducirá la anchura de los carriles y arcenes de la carretera de ocho a siete metros, ampliando la calzada existente para incorporar el nuevo bidegorri con un mínimo de tres metros de anchura.
En total se han expropiado casi 1.500 metros cuadrados correspondientes a diecisiete parcelas, pero además será necesaria la ocupación temporal de otros 1.434 m2 en trece parcelas.
Según puede leerse en el proyecto redactado por Sestra «los criterios para la determinación de por qué margen realizar la ampliación de la calzada han sido los de reducir la entidad y número de afecciones, y lograr una solución lo más económica posible. La anchura útil del itinerario será de 3 metros, ajustándose ligeramente en dos puntos, con el fin de evitar actuaciones de coste elevado».
Todo el bidegorri estará iluminado, y aprovechando las zanjas, se quiere cambiar la conducción de gas e incorporar telecomunicaciones a Olabarrieta.
Túnel de Aiastui
A punto de despegar está también el paso inferior del punto kilométrico 12,7 de la GI- 2630 en el mismo barrio de Olabarrieta. El enlace que muchos conocen como el de Aiastui, al comienzo del puerto de Udana, exige sortear o salvar el tráfico que sube y baja del puerto, con la consiguiente peligrosidad. El túnel ofrecerá seguridad no solo para el peatón también para el automovilista y además la conexión de Olabarrieta con Murgia será mucho más cómoda y despejada al haberse alcalzado un acuerdo para derribar el antiguo pabellón de Eguzkialde.
Lo cierto es que 2015 va ser un año de cine para Olabarrieta, al estar previstas varias obras relevantes en lo referente a movilidad, accesibilidad y seguridad. Al bidegorri hay que sumar las obras ya en marcha para la instalación de semáforos de reducción de velocidad, y la mejora del cruce de acceso al barrio rural, que absorbe una importante densidad de tráfico en la carreta GI-2630 que une el puerto de Udana con Oñati.
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